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El pez neón cardenal (Paracheirodon axelrodi) es una especie popular de pez de acuario originaria de la cuenca del río Orinoco en Sudamérica. El pez neón cardenal es un pez popular en el acuario debido a su atractiva coloración y facilidad de cuidado. Sin embargo, se deben mantener en grupos de al menos 6 individuos para asegurar su bienestar y evitar el estrés. También es importante mantener la calidad del agua y proporcionar una dieta equilibrada para mantenerlos saludables.
El pez neón cardenal tiene un cuerpo alargado y delgado que puede alcanzar hasta los 4 cm de longitud. Su cuerpo es de color plateado con una línea horizontal de color azul eléctrico que recorre desde el hocico hasta la base de la aleta caudal, y debajo de esta línea hay otra de color rojo intenso. La aleta dorsal es de un color azul verdoso y la aleta anal es roja con una franja de color azul en su borde. La aleta caudal es bifurcada y de color transparente.
Además, su cabeza es pequeña y su boca también y apunta hacia arriba, lo que indica que es un pez que se alimenta principalmente de comida que flota en el agua. Sus ojos son grandes y están situados en la parte superior de la cabeza, lo que le permite una buena visión en el agua.
Es importante destacar que, aunque el pez neón cardenal y el pez neón (Paracheirodon innesi) se parecen mucho, tienen algunas diferencias en su morfología. El pez neón cardenal tiene una línea roja más brillante que el pez neón, su aleta anal es más corta y la línea azul de su cuerpo no se extiende hasta la cabeza como la del pez neón.
El pez Neón Cardinal (Paracheirodon axelrodi) es un pequeño pez de agua dulce originario de la cuenca del río Orinoco en América del Sur y como cada pez tiene sus características como que en su tamaño adulto llega a medir de 3 a 5 cm, en cautiverio pueden vivir hasta 5 años.
Son peces pacíficos y se pueden mantener en grupos, se recomienda mantenerlos con peces pequeños y pacíficos. Evitar la convivencia con peces agresivos o de gran tamaño. Se encuentran en ríos de aguas negras y claras, arroyos y lagunas poco profundas en la cuenca del río Orinoco en América del Sur.
Tienen un cuerpo alargado de color plateado, con una línea iridiscente azul-verde que va desde la parte superior de la cabeza hasta la base de la aleta caudal, y una línea roja brillante que corre a lo largo del centro del cuerpo.
El cuidado adecuado del pez Neón Cardenal es esencial para mantenerlos sanos y vivos. Debe ser de al menos 20 litros y estar equipado con un filtro de buena calidad, un calentador y un termómetro. La temperatura ideal del agua debe estar entre 23 y 27 °C y el pH entre 6.5 y 7.5. Los neones cardenal prefieren una luz tenue y sombras, por lo que se recomienda proporcionarles una iluminación suave.
Es recomendable hacer cambios de agua semanales del 20% al 25% para mantener los niveles de nitrato y otros químicos en equilibrio. Debido a que provienen de ríos con corrientes moderadas, se recomienda recrear un hábitat similar en el acuario con algunas plantas flotantes, plantas de fondo y troncos.
Son susceptibles a algunas enfermedades comunes de los peces de acuario, como la enfermedad del punto blanco y las infecciones bacterianas. Mantener una buena calidad del agua y una dieta equilibrada puede ayudar a prevenir estas enfermedades.
El Neón Cardinal es un pez omnívoro y acepta una variedad de alimentos en su dieta. Se puede alimentar con una combinación de alimentos comerciales en escamas, alimentos vivos o congelados como artemia, daphnia, larvas de mosquito y alimentos vegetales como espirulina y algas en tabletas. Es importante asegurarse de que se alimente adecuadamente y no se sobrealimente, ya que puede causar problemas de salud en los peces.
No necesitan una preparación especial para reproducirse en cautiverio. Para la reproducción, se recomienda un tanque separado con agua suave y ligeramente ácida, una temperatura de alrededor de 26-28 °C y plantas vivas para que los peces depositen sus huevos. La hembra puede poner hasta 200 huevos y los padres deben ser retirados del tanque de reproducción después de la puesta para evitar que se los coman. Los huevos eclosionan en 24-36 horas.
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